Uno de los principales beneficios que destacan los estudiosos del cannabis es la reducción del dolor, gracias a la acción analgésica y las propiedades antiinflamatorias del compuesto vegetal llamado cannabidiol (CBD). ¿Sería entonces posible minimizar los síntomas de dolor causados por la quimioterapia?
El cáncer de mama es uno de los cánceres más graves, es la segunda causa de mortalidad entre las mujeres y se convierte en el más frecuente a nivel mundial. Los tratamientos convencionales son incómodos, dejándolos incapaces de realizar tareas básicas debido a las constantes náuseas, vómitos y dolor.
La FDA aprobó la eficacia del CBD como medicamento para el tratamiento de las convulsiones relacionadas con la epilepsia. En cuanto al cáncer, hay que tener cuidado ya que aún son estudios preliminares.
Mientras tanto, comprendamos un poco por qué puede ser una buena alternativa en el tratamiento del cáncer.
El cannabis se ha utilizado durante mucho tiempo en el campo médico. Sin embargo, a pesar de sus beneficios, no fue hasta finales del siglo XX cuando comenzó a considerarse un potencial tratamiento de quimioterapia.
El CBD puede ser lo que la mayoría de la gente está buscando: una forma natural de reducir la inflamación, mejorar el sueño y curar el tejido dañado, además de reducir otros síntomas ya mencionados del tratamiento del cáncer.
El alivio de este dolor a través del Cannabis ocurre como un inhibidor de la acción de moléculas que potencian las células cancerosas. En el caso del CBD, cambia la forma en que la información pasa de una neurona a otra, bloqueando temporalmente los estímulos del receptor GPR55, un receptor que necesita estar menos potenciado para controlar el dolor.
Aún así, continúan los estudios para averiguar si el uso de estos antagonistas realmente controla el dolor.
Cannabis Sativa tiene propiedades llamadas cannabinoides que actúan sobre el sistema endocannabinoide, ya presente en el cuerpo humano. Este sistema ayuda a mantener el cuerpo en equilibrio. Desde su descubrimiento, los investigadores han revelado cómo regula los neurotransmisores y apoya los efectos psicotrópicos del cannabis. Algunos estudios incluso llegan a decir que los cannabinoides pueden prevenir el cáncer de mama.
Los científicos avanzan en estudios relacionados con el impacto del CBD en las células cancerosas, analizando en qué medida actúa el cannabis sobre los fármacos de quimioterapia, así como el alivio de algunos síntomas del tratamiento. Ya que muchas mujeres que se someten a una mastectomía o que padecen cáncer de mama pueden tener una mejor calidad de vida.
Aceite Full Spectrum de Life Green
Los estudios de casos muestran resultados prometedores con el aceite de CBD, y señalan que su efecto es antiproliferativo en las células de cáncer de mama e incluso puede prevenir su desarrollo.
Los principales reportes de mujeres con cáncer de mama necesitan vivir con un tratamiento con TAMOXIFENO, por ejemplo, y comienzan a tener pocas horas de sueño, sufren los efectos del sudor y sequedad de boca. El aceite de CBD está destinado a causar menos reacciones y es por eso que estas mujeres pueden dormir mejor y sentirse más descansadas.
¿Qué paciente de cáncer puede hacer uso del cannabis industrial?
ANVISA exige como requisito previo para autorizar la importación de Cannabis que el paciente presente algún tipo de refractariedad. Es decir, la persona debe haber probado otros tratamientos para ese síntoma, pero no obtener resultados. Por ejemplo, probó un medicamento para las náuseas o el dolor, pero no logró el resultado esperado.
Los aceites ricos en CBD pueden causar cambios en la función intestinal, como la consistencia de las heces y la cantidad de deposiciones. Además, el paciente puede sentirse somnoliento.
Ya los aceites ricos en THC, los efectos pueden ser ansiedad, síndrome de pánico, somnolencia y sequedad de boca.
Por lo tanto, es importante hablar con el médico para comprender el mejor tipo de producto y dosis para el caso.
Antes de cualquier tratamiento, es imprescindible consultar a un médico, a fin de ser apto para el consumo de cannabis industrial.